lunes, 15 de junio de 2009

Duchamp está sobrevalorado




Creo que la tendencia de gran parte del arte contemporáneo a "descontextualizar" los objetos o signos (icónicos, verbales o sonoros) para crear mensajes estéticos nuevos se ha convertido en un lugar común. No puedo negar el valor que tuvo en su momento la Fuente de Duchamp como un cuestionamiento sobre la naturaleza de lo artístico, como una crítica al esnobismo y superficialidad del mercado del arte, y como un replanteamiento de los valores estéticos de la época. Sin embargo creo también, que no es posible negar que a raíz de los movimientos artísticos de vanguardia del siglo pasado, el arte en muchos casos se ha convertido en una mero ejercicio (y/o competencia) de ocurrencias "subversivas", "novedosas" o "transgresoras".

Recuerdo que, durante mi fallido y único trimestre en la licenciatura en diseño gráfico, tomé clase con un profesor que además de artista, era admirador de Duchamp y de Christo (el artista búlgaro, no el hijo del dios). Cuando alguien, en una clase, le cuestionó sobre el valor estético de poner un mingitorio de cabeza o de envolver el edificio del Reichstag en tela, el profesor, viendo atacados sus más veneradas influencias artísticas contestó con notable molestia:

-Sí, tal vez voltear un baño o envolver un edificio no requieran la técnica de Rembrandt, Miguel Ángel o Fidias; pero aquí la cuestión no es el objeto, el producto, sino el proceso creativo detrás de éste. No es cuestión de técnica, es cuestión de innovación, de concebir algo nuevo. ¡Concíbanlo!

La verdad es que ese argumento jamás me convenció. El afan de innovación en el arte no es más que un valor relativo a esta época; durante el Renacimiento, -por ejemplo- se creía que sólo se podía alcanzar la perfección al imitar a los modelos clásicos (la doctrina de imitatio auctoris). Además, escudarse en un supuesto "proceso artístico" no es más que una treta, pues de ese modo siempre se podrá argumentar que una obra tiene -a pesar de su pobreza- más significaciones de las que aparenta. Reconozco mis limitaciones y aún no me creo capaz -y no se si algún día lo seré- de definir la naturaleza y el objeto del arte (salvo el tautológico ser bello), pero tengo serias dudas sobre si innovar y descontextualizar son características per se de la obra artística... O tal vez sólo soy un tipo anacrónico y tradicionalista, incapaz de comprender las profundas complejidades de trazar dos rayitas negras y una amarilla sobre un lienzo café de dos metros de altura.






...Aunque por otro lado, seguir las ideas de Duchamp podrían convertirme fácilmente en un artista vanguardista de la palabra. Propongo trasladar los postulados estéticos de la Fuente al ámbito literario, y que los siguientes textos sean publicados, tal como aparecen aquí, por Cátedra, Siruela o Castalia. Con edición crítica (por supuesto) a cargo del doctor Antonio Alatorre


¡Contemplad la obra de la mente maestra que pudo unir a Tristan Tzara
y a Marcel Duchamp!
¡Contempladla! y después no podreis evitar sufrir el Síndrome de Stendhal...









...o por lo menos el síndrome del intestino irritado.



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9 comentarios:

  1. No puedo estar más deacuerdo. ¿ o no?. La música ha muerto. El cine ha muerto. El arte ha muerto... queda algo inerte. Dios ha muerto. Lo cierto es que... Nietzsche si que ha muerto. ¿ Queda algo que escribir... queda algo inerte?.

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  2. Personalmente creo que el arte no ha muerto, los que han muerto son los artistas (y Dios, y Nietszche, claro). Creo que si nos vamos hacia atrás, encontraremos bastantes obras que aún tienen mucho por decir.

    Y no es que sea reaccionario, simplemente creo que frente a la esterilidad de los creación actual podemos revalorar mucho de lo ya creado.

    Agradezco el comentario

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  3. Mmmm mira no se como explicarlo... lo intentare en este comment y mira que si es muy largo... ni modos porque te metiste en camisa de once varas ja ja :D aquí va.

    Creo que tu punto es muy acertado cuando leí lo de Duchamp también me puse a pensar y dije... la verdad no hay que darle mucho crédito más que hacer una crítica no? y no vemos haciendo alabanza a los críticos de hoy no? ya que su primer objetivo de duchamp era eso, burlarse de la gente que cree sabe de arte y se van en banda sin pensar un poquito.

    Por otra parte si tal vez cambio el arte, pero a mi me gusta pensar en el arte como algo que tenga tal vez un poco de sentido o que me logre transmitir algo, Duchamp y su migitorio no me transmiten nada de nada... tampoco Christo...

    Creo que por la vida hay mucha gente que es muy sobrevalorada por lo que hace, claro eso se da al fanatismo sin pensar. Si yo tengo miles de fans y se que me van a seguir haga lo que haga, pues la neta hago una mamada y listo todos diran que es arte creo que eso es abusar... abusar y pendejar a la gente.

    Uhhh ya es una carta pero es un tema muy amplio. :P Le voy a parar ahí pa no aburrite :P

    Saludos buentoneros!!!
    P.D. la opinión es de Pustulio :)

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  4. Pustulio, la ironía es que el trabajo de Duchamp sólo adquiere sentido contrastándolo con los valores estéticos tradicionales. El trabajo de Duchamp sólo tiene valor -como bien señalas- en tanto crítica, sin la "tradición" la Fuente se presentaría como vacía de significados y carente de trascendencia.

    Respecto a la extensión del comentario, tienes toda la libertad para expresar tu opinión, sin importar que tan amplia sea, de ninguna manera me aburre.

    Agradezco tu comentario.

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  5. No se me acelero el corazon ni alucine, hoy no sufri el sindrome. Ni modo.

    Saludos Jaques!

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  6. ¿Christo Stoitchkov?. Ah, no, ése es Hristo. Qué jugador, por cierto. Coincido contigo, Jacques, en que sólo se puede apreciar la obra en cuestión en el contexto de los cánones estéticos tradicionales, y que su valor es más como crítica a éstos, que como obra artística en sí. Empero, considero también que no hay que dejar de lado el aspecto subversivo y transgresor implícito (al menos deónticamente) en la creación artística, y que éste no se refiere únicamente al ámbito de la estética, sino a todos los aspectos de la cultura y la sociedad. Tal vez la mayor perfección en términos de técnica artística devenga en un objeto inocuo si carece de esa índole trasgresora. En fin, aquí se entraría a otra discusión sobre si el arte tiene alguna función práctica. Mejor aquí le paramos.

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  7. En la Facultad de Filos de la UNAM solemos decir que el arte existe por el mero sentimiento de necesidad de saberse vivo. Simple y llano, pero efectivo.

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  8. Da para mucho el tema, y cómo no, hablamos del Arte... decir que el arte está muerto es bastante triste, decir que no se sabe qué es el arte es casi igual de triste...

    Te recomiendo este artículo :
    http://wilber.shambhala.com/html/misc/tosewo.cfm/

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  9. Me faltó, se titula: El arte y el yo del observador

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